“Y si de entre vosotros uno es fuerte en el Espíritu, lleve consigo al que es débil, a fin de que sea edificado con toda mansedumbre para que se haga fuerte también” (Doctrina y Convenios 84:106). El nuevo, revisado Progreso Personal anima a cada mujer joven a ser una Abejita de Honor.
Se define como un mentor a un instructor o consejero sabio en quien confiar. Estos hombres o mujeres de rectitud generalmente son personas que han transitado una trayectoria en su vida rectamente. Son guías. Para las mujeres jóvenes, el ejemplo y la influencia recta de sus pares y otros es crítico en un mundo con cambios de valores y ética moral. Se aseguran que nadie quede en el trayecto en su etapa de progreso.
Esto no es una idea nueva. Las escrituras y la Historia de la Iglesia están repletas de ejemplos de grandes hombres y mujeres cuyas vidas fueron bendecidas por personas de rectitud. Ellos ayudaron a preparar a otros para sus futuras misiones. María tenía a Elizabeth, Noemí que era suegra de Rut, la ayudó a saber que hacer; Josué tuvo a Moisés; Alma a Amulek en la predica del evangelio; el ángel Moroni lo fue para el Profeta José Smith. Estas personas rectas animaron y enseñaron las cosas que habían aprendido por la experiencia. Ellos pasaron su conocimiento a otros, de modo que cada uno pudiera edificar y preparar mejor para cumplir sus roles y misiones divinas.
Aprende de la Abeja del Honor en las Mujeres Jóvenes animará a cada una a tener a alguien de rectitud a su lado. Después que las mujeres jóvenes terminen su Progreso Personal y reciban su medallón de Joven Virtuosa, ellas pueden convertirse en personas de rectitud para ayudar a otras mujeres jóvenes y en este proceso ellas pueden ser una Abeja de Honor. La Abejita de Honor es un símbolo de alguien que ido más allá de la segunda milla junto a los requisitos.
Una mujer joven que desee ser una persona de rectitud ayudando, puede ganar la Abeja de Honor leyendo el Libro de Mormón una vez más y completando 40 horas de servicio. Todas o parte de estas horas de servicio deben dedicarse a ayudar a otra mujer joven. Una mujer joven puede ganar tantas Abejitasde Honor como ella desee en carias ocasiones completando los requisitos.
El recientemente revisado Progreso Personal enfatiza la necesidad de las mujeres jóvenes de llegar a ser jóvenes de rectitud para ejercitar más plenamente el amor puro de Dios. Las mujeres jóvenes que leen el Libro de Mormón y proveen servicio ayudando pueden ganar el premio la Abaje de Honor.
En la sociedad de hoy, las mujeres jóvenes necesitan personas e rectitud a su lado. Nunca antes como ahora ha sido necesario de reales modelos de rectitud. Los mejores y más efectivos modelos de rectitud son sus padres. Se fomenta una eterna relación cuando una madre asiste a su hija en su Progreso Personal. La lectura diaria de las escrituras, el servicio y compartir experiencias consolidan este eterno enlace. Los modelos de rectitud pueden ayudar mejor cuando han experimentado y han terminado realmente las cosas que pueden enseñar a otros. Él o ella es un líder que debe estar siempre al frente.
Todos podemos hacer más por cercar, proteger y enseñar a nuestras preciosas mujeres jóvenes, las futuras madres de la Iglesia.
El Presidente Henry B. Eyring dijo del Salvador: -“En una cierta hora no muy distante…usted sabrá que él conocía la manera y deseo compartirla con usted. Y usted habrá confirmado que El es el ejemplo perfecto para seguirle. En todo servicio él le brindará el real servicio”.
Como Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, es mi deseo que cada mujer joven tenga muchas personas de rectitud a su lado para: -“conducir, dirigir y caminar a su lado, mientras crezcan y hagan todo lo que su Padre Celestial propuso para que hagan. Levanten las manos desfallecidas, la luz dentro de vosotras será un poco más brillante e iluminará la vía ante nosotras”.
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